Gracias a las increíbles vistas panorámicas, esta escondida cima fue estratégicamente elegida durante la Guerra Civil Española para defender la ciudad de los ataques aéreos. Hoy en día, las armas de guerra han desaparecido y las cervezas y las guitarras están en este único punto de relax.
Top Tip
Recomendamos tomar el metro, coger la línea amarilla hasta Alfons X y de ahí hacer un poco de ejercicio, una caminata de media hora cuesta arriba. Si no te apetece, puedes coger un taxi desde el centro por 20 euros aproximadamente.